lunes, 27 de febrero de 2017

Manipulación informativa

 Opinión
Que la prensa le plante cara al impresentable Donald Trump, me parece más que razonable,
Manuel Dobaño. Periodista
por los muchos ‘méritos’ que lleva acumulados en poco tiempo el histriónico mandatario norteamericano; pero que prácticamente toda la prensa madrileña en bloque ignorase la histórica y multitudinaria manifestación ciudadana que discurría el pasado día 18 por las calles de Barcelona en favor de la acogida a los refugiados, me parece absolutamente lamentable, y hace un flaco favor a lo que debiera ser una información veraz e imparcial de una noticia que sí destacaba la prensa extranjera. Silenciar que más de 160.000 personas se hayan echado a la calle por una causa justa, es, sencillamente, una burda manera de manipular la realidad.

De un tiempo a esta parte, parece ser que casi todo lo que pasa en la ‘periférica’ Cataluña, y más concretamente, en Barcelona, no exista para el resto de España y solamente interese aquello que acontece a la sombra de la diosa Cibeles. El descarado centralismo informativo es más que evidente en estos tiempos convulsos que nos ha tocado vivir. Desde mis más de tres décadas de excitante experiencia periodística en la dinámica comarca del Baix Llobregat, que inicié en la transición política española, no había observado una crispación como ahora. Los diferentes medios de información y, sobre todo, las tertulias radiofónicas y televisivas, están llenas de demagogos, falsos profetas y más de un periodistas de pacotilla. 

Sobre la manipulación informativa, mi paisano Suso de Toro me comentaba tiempo atrás en una entrevista que le hice: “La prensa madrileña es ‘ombliguista’, de una gran uniformidad y de un localismo nacionalista atroz”. En mesetarias tierras madrileñas, alguien, partidario de intoxicar la actualidad ‘por lo civil o lo criminal’, soltaba por su boquita que en Cataluña no se puede vivir y que no paramos de atizarnos la badana. Una vez más era mi amigo (“El Cínico”) quien me comentaba que, “si tenemos en cuenta la premisa de que lo que no sale en los medios, no existe; fácilmente deduciremos que la mani pro refugiados tan solo fue un sueño, una ficción…”; al tiempo que me profetizaba que “lo peor está por llegar, cuando se tense aún más la cuerda del asunto ese del referéndum”.También puede leer este artículo en El Prat al Día.

No hay comentarios: